lunes, 24 de septiembre de 2012

Un Joven


Un Joven

Diablo llega corriendo a su jefe. Está temblando y le dice al viejo diablo:
-¡Hay que hacer algo inmediatamente, porque en la Tierra un hombre ha encontrado la
verdad! Y una vez que la gente co­nozca la verdad, ¿qué le pasará a nuestra profesión?
El anciano se echó a reír y dijo:
-Siéntate y descansa, y no te preocupes. Está todo arreglado. Nuestra gente ya está allí.
-Pero -dijo él- yo vengo de allí y no he visto ni un solo diablo.
El anciano dijo:
-¡Los sacerdotes son mi gente! Ya han rodeado al hombre que ha encontrado la verdad.
Ahora se convertirán en los me­diadores entre el hombre de la verdad y las masas.
Levantarán templos, redactarán las escrituras, interpretarán y distorsiona­rán todo. Le pedirán
a la gente que adore, que rece. Y en toda esa barahúnda, ¡la verdad se perderá! Ese es mi
viejo método, que siempre ha triunfado.


No hay comentarios:

Publicar un comentario